Decana Deborah Ball: “No queremos que los profesores improvisen”
Durante un seminario organizado por la Facultad de Educación de la UC y su Sistema de Prácticas, la decana de Educación de la Universidad de Michigan aseveró que en las salas de clase sólo deben trabajar quienes posean conocimiento técnico y disciplinar avanzado. “Los buenos profesores deben manejar un conjunto muy particular de conocimientos, habilidades y capacidades” sentenció.
Desmitificar creencias como que un buen profesor sólo necesita tener un buen carácter para tratar a los niños, o mucha paciencia y talento innato para educar, fue parte del discurso expuesto por Deborah L. Ball, decana de la Escuela de Educación de la Universidad de Michigan y directora del Centro de Estudios para la Formación Inicial, Teaching Works de la misma universidad norteamericana, durante el seminario “Aprender a enseñar: el currículum basado en la práctica en la formación de profesores”.
La visita de la profesora Ball se enmarcó dentro de la colaboración entre la Facultad de Educación de la UC y la escuela de Educación de la Universidad de Michigan consolidada a través del trabajo en el Convenio de Desempeño entre la UC y el MINEDUC (PUC 1201).
Durante la jornada, la profesora Ball explicó a un auditorio de más de 250 personas el currículum que ha desarrollado junto a su equipo para la formación de profesores basados en las prácticas generativas (High Leverage Practices) en la Universidad de Michigan, y que se han ocupado como referentes en los programas de formación inicial de la Universidad Católica de Chile.
Durante las palabras inaugurales, la decana de Educación de la UC Lorena Medina recordó que la temática del seminario, dado el contexto país que vivimos, resulta central y que se relaciona de manera directa con el propio proyecto de cambio del núcleo de formación inicial docente en la Facultad de Educación de la UC.
La profesora Medina recordó que en los últimos años la Facultad de Educación UC ha generado un sistema de prácticas pedagógicas con una red compuesta en la actualidad por más de 50 instituciones escolares en convenio y más de 100 centros de prácticas en total, adscritas a las tres dependencias con que se cuenta en Chile (…) Además, la Facultad rediseñó más de 75 cursos y 12 prácticas, “las que han sido observadas desde un alineamiento constructivo, permitiendo una mirada transversal a la vez que en profundidad de cada una de las actividades académicas, persiguiendo coherencia y lenguaje común en los programas de formación y la comunidad académica que lo sustenta”, según explicó.
“No queremos que improvisen”
Durante su charla, Deborah L. Ball se refirió a aspectos relativos a la formación inicial docente y la importancia que esta carrera reviste para el resto de la sociedad.
-La profesión docente es la única ocupación que toca a todos los ciudadanos de una sociedad, de una nación. Es la única profesión que trabaja con cada persona del país, y es la encargada de producir y formar los recursos humanos del futuro –aseveró.
La académica agregó que la escuela representa para muchos la única oportunidad de salir adelante, ya que crea oportunidades para cada miembro de la sociedad. “Expande las ideas, aumenta la cohesión social, disminuye la pobreza” sentenció.
Deborah Ball centró su charla en la etapa inicial de la carrera docente, desmitificando algunas creencias que existen en torno a la carrera docente, y aseveró que la mayoría de ellas son falsas o son producto más de las buenas intenciones que de la evidencia. “La gente cree que enseñar no es tan difícil, y que un buen maestro se hace en la práctica. Otros creen que enseñar a los niños depende de la creatividad, del buen carácter y la paciencia de un profesor. Que un buen maestro tiene algunas cualidades innatas, que la gente nace para enseñar” ironizó.
-La carrera docente es una profesión compleja que requiere de un conjunto de conocimientos, habilidades de razonamiento y expresión y técnicas específicas. Para un país o una sociedad, es muy riesgoso confiar sólo en la creatividad de las personas o el talento innato para convertirse en profesores. Una nación no puede confiar sólo en las intuiciones de sus maestros. No queremos que los profesores improvisen, sino que posean conocimiento técnico avanzado –argumentó.
-Ponemos a los niños en riesgo si confiamos sólo en el talento innato de los profesores, si no ponemos en la sala de clases a gente especializada. Sólo si el sujeto demuestra que es capaz de poseer el mínimo estándar de conocimiento y habilidades debería entrar a una sala de clases. No se puede improvisar –enfatizó.
Lenguaje común
La decana Ball precisó que entre las dificultades específicas que enfrenta un profesor en el aula está que el niño no habla ni piensa como los adultos. “Este es un desafío que el profesor enfrenta a cada minuto, todos los días. No es obvio cómo piensan, ni cómo llegan a sus conclusiones. ¿Qué se les puede preguntar? ¿Cómo? Las decisiones en el aula son muy difíciles” agregó.
Más adelante, Deborah Ball identificó tres problemas mayores que enfrenta la profesión docente a nivel internacional.
-En primer lugar, no existe un lenguaje común para esta carrera. En segundo lugar, no existe un currículum compartido para la formación inicial docente. Y en tercer lugar, no existen prerrequisitos, estándares que se le puedan exigir al profesor recién titulado. Cada programa de formación inicial posee sus propias ideas sobre lo que es ser un buen profesor, no existen normas compartidas que indiquen si una persona está preparada o no para ejercer la carrera y hacer clases –afirmó.
Al final de la conferencia, la decana de Educación de la University of Michigan recordó que en su facultad se trabaja con un modelo de curriculum basado en la práctica, que consiste en tener aproximaciones sucesivas a prácticas claves para la enseñanza.
Magdalena Müller, jefa del Sistema de Prácticas de la Facultad de Educación de la UC, comentó al cierre del seminario que “esta discusión está en el núcleo de lo que nos preocupa como Facultad de Educación, y es justamente en eso en lo que estamos trabajando en el sistema de prácticas generativas para nuestros estudiantes de Pedagogía: concordando un lenguaje común, cómo generar discusiones productivas, cómo incentivar el pensamiento de los alumnos, estableciendo estándares y metas pedagógicas, haciendo que todos aspiremos a los mismos niveles de conocimiento y habilidades docentes”, reconoció.
La actividad finalizó con un panel final de comentarios y preguntas con el público presente, en el que se abordaron Experiencias locales de innovaciones para un currículum basado en la práctica en la formación de profesores, y que fue moderado por Pilar Cox, directora de Pregrado Facultad de Educación UC, y en el que participaron Lorena Meckes, investigadora UC e integrante del Consejo Nacional de Educación; Alejandra Meneses, Coordinadora del Rediseño del Convenio de Desempeño (PUC 1201) y Magdalena Müller, profesora y jefe Sistema Prácticas Educación UC.
Texto: Francisco Zabaleta, Facultad de Educación UC